POETRIA MINOR

O "Los Poetas Menores" de El Capaneo:
un hermano menor, pero ruidoso e inquieto,
que quiere salir a jugar...


Abrimos esta sección de poetas jóvenes y desconocidos (algunos, aun para sí mismos), que decidió retoñar de las entrañas del gigante CAPANEO, alimentándose de su POETRIA MAIOR.

Poetria, para que puedan darse cita los ejercicios de creación y traducción poética de los amigos.

"Minor", como un gesto de reverencia conmovida que hacemos hacia los grandes poetas (porque reconocemos la grandeza), pero no menor en dignidad, porque surge del mismo palpitar humano del corazón.

Un seminarium, un "semillero": una escuela de poetas y traductores...
Para cuidar a los hermanos menores.


Revista Universitaria El Capaneo




Beethoven II: La Sinfonía del Destino


Que la quinta sinfonía de Beethoven es llamada la “Sinfonía del Destino” es algo conocido por muchos. Ya bastante se ha comentado sobre ella y poco creo poder agregar a lo ya dicho; sin embargo, quisiera compartir mis impresiones en estos breves párrafos.


Beethoven. Sinfonía 5, dir. H. von Karajan. 1

Primer movimiento. El Destino “toca a la puerta”; el Destino, aquello para lo cual estamos hechos, para lo que nuestra vida esta hecha “toca a la puerta”, se nos presenta de repente. Si bien era esperado (porque, ¿quién puede decir que no espera a su Destino, su llamado?), sorprende estruendosamente al que lo encuentra. Ante el significado último de su vida, frente a su Destino, el hombre no puede más que sentir vértigo. La potencia expresada en este movimiento no es más que un signo de esto.

Segundo movimiento. Una vez que el Destino “toca a la puerta”, al contrario del dicho popular, permanece en su lugar, no se marcha. Uno es el que, ante la vertiginosidad y la sorpresa que siente ante su manifestación, lo deja de lado. Pero el destino, la respuesta a nuestra vida, permanece y se sigue presentando al hombre continuamente. Esta vez, de manera más dulce y apaciguada, más amable y más suavemente, pero no sin menos firmeza y energía: sigue siendo el mismo reclamo. El hombre, tal vez para reconocerlo más fácilmente, tenga que ver esta faceta del destino que, no obstante, no estaba oculta antes. Solo le queda aceptar la llamada para comenzar a caminar hacia Él.


Beethoven. Sinfonía 5, dir. H. von Karajan. 2

Tercer movimiento. Aquí se ve al hombre que se pone en camino con toda la convicción de que se dirige hacia su Destino. Le ha abierto la puerta al destino y ha adherido a su llamada y se ha puesto en marcha. La fuerza en su caminar no sale de él mismo, él, que antes había sido sorprendido y asustado, sino de la certeza de que camina hacia su bien, de que cada paso que da es un paso más hacia de su Destino. Con esta seguridad, nada puede detenerlo ni distraerlo de su meta: ni las alegrías pasajeras, ni los pormenores del camino o las adversidades más grandes.

Cuarto movimiento. Aquí se llega al final del camino, luego de la marcha fatigosa pero hecha con determinación. El hombre se encuentra completamente frente a su Destino. Es como si, de repente, todo se iluminara y se manifestara como siempre tuvo que ser. El sentido de la vida del hombre se descubre en su totalidad. Es en este momento cuando todo lo anterior cobra su significado real; cuando todo lo vivido anteriormente descubre su porqué. Se recupera todo lo anterior y se lo transforma en la gloria del Destino final del hombre.

Nicolás P.

1 comentario:

@hanniahernandezs dijo...

Me gusta mucho esta sinfonia al igual que su significado.